Curiosa mezcla la que sugiere este título de blog, ¿no crees? 2020 y la música recurre al grunje: ¿por qué recuperamos este tipo de género ahora? Y, ¿por qué demonios mezclarlo con trap? Ya sabes que no soporto esos blogs que se tiran el moco así que vamos a entrar ya en materia.
El por qué de los fenómenos
En este caso hay un componente generacional, y lo hay por dos vías: la primera es la nostalgia millenial, y la otra el género grunge como un estilo redescubierto en la era de la generación Z. Este género se ha revelado aún hoy en día como un «poemario en blanco» para comunicar historias o circunstancias personales adversas (depresiones, crisis existenciales, desengaños) especialmente en jóvenes. Las tentaciones de revivir un «género suicida” se han acentuado en este tiempo de pandemia y relaciones sociales limitadas donde todo es más frío y la juventud no dispone del lado humano.
Con todo ello, entre unos y otros, humildes pioneros y tiburones de la industria han reflotado esta música tan peculiar, hasta el punto de sumarse a ella algunos artistas mainstream como Bad Bunny, que se ha subido al carro hace poco, y es que ya estaban funcionando bien artistas como Lil Nas x o Lil Peep en este género con anterioridad.
Esto ya había pasado antes…
Por otro lado tiene todo el sentido del mundo. Los artistas siempre han recurrido fundamentalmente a dos posibilidades para crear “nueva” música: el pasado o las culturas ajenas. La mayoría lo hicieron por intereses de tipo artístico y/o de marketing (sí, antes de que se contemplara la palabra «marketing» también existía el marketing).
Verás: Liszt -compositor húngaro romántico- puso su mirada en España para hacer su Rapsodia española en un momento en el que la mirada de toda Europa estaba puesta en España como paraíso romántico, cuna de viejas historias y diversidad cultural. Debussy -compositor francés de principios del XX- miró hacia Asia menor y sus orquestas de gamelán para componer su música durante la etapa impresionista. En su concierto de Aranjuez, Joaquín Rodrigo -otro de los grandes de la primera mitad del XX- profundizó en el barroco para componer imitando las formas fugadas.
Todas estas obras resultaron frescas en cada lugar en el que florecieron, fruto del contraste entre una visión personal y una suerte de locus amoenus que sirvió a sus autores como chispazo creativo. Y es que nunca ha existido ni existirá nada totalmente nuevo, solo hay permutaciones; numerosas mezclas de lo anterior o lo que en nuestra casa resulta diferente, y de esa manera se crea ese espejismo de novedad y frescura. Ya lo decía Newton: “Si he podido ver más allá es por haberme subido a hombros de gigantes”.
El ejemplo más reciente lo podemos situar hace unos años en la música urbana, y dura hasta hoy. Y es que hace tiempo que se comenzó un proceso de recuperación de la música disco, el funk y en general el sonido de los 80s, con artistas como Dua Lipa, Selena Gómez, Miley Cyruss o recientemente Shawn Mendez y Bad Bunny construyendo su estilo en torno a este tipo de sonido (si, Bunny está en todos los fregaos). ¿Y por qué no iba a pasar con el grunge? Como Alf en forma de chapas, ¡todo vuelve!
¿Quién rescató al grunge?
Hay muy poco (o más bien nada) estudiado sobre este tema, pero uno de los pioneros (que no tiburones) sin duda es Lil Peep. Este artista lleva trabajando la fusión de trap y grunge desde sus primeros singles, lanzados allá por el 2016. Desde que el artista comenzara a subir sus sencillos a Youtube estalló y sus temas comenzaron a hacerse virales.
La teoría más plausible sobre esta recuperación sería la afluencia de numerosos artistas que durante el proceso de viralización de los primeros trabajos de Lil Peep y similares también se sentían representados por ambos géneros y llegaron hasta sus redes sociales, escuchando después su música y de alguna forma dejándose influir por ella. A partir de ahí es posible que el movimiento se expandiera hasta hoy, que como digo Bad Bunny -en uno de sus discos artísticamente más eclécticos (El último tour del mundo)- ha cantado algún que otro tema de grunge trap (⚠️ ¡en ese mar sí que hay tiburones! ⚠️).
¿Es posible la coherencia estilística en esta mezcla?
Resulta interesante la mixtura de estilos aquí. Encontramos una vez más los graves del trap, que por otro lado extensibles prácticamente a cualquier género en el que tenga sentido un ritmo binario. El tempo lento y la dureza del ritmo trap le dan un rollo especial a temas que normalmente llevarían un ritmo el doble de veloz, sin contar con los guitarreos fuzzy y las voces distorsionadas que sugieren gritos, lo cual hace buena conexión con el sentimiento de rebeldía y de malestar en la juventud.
Con estos ejemplos podrás comprobar como el ritmo del grunge es casi el doble de rápido que el del grunge trap
Volviendo a la estética fuzzy, ese grito que tanto representa al grunge no es en absoluto ajeno al trap, género en el que también abunda la distorsión, si bien está aquí más centrada en el grave. Curiosamente muchos temas que combinan trap con grunge saturan voces y guitarras con distorsión fuzzy, pero el bombo y el bajo suelen ser redondos.
A decir verdad en mi trabajo como productor no me he enfrentado aún a este tipo de producciones, pero el concepto estético es un mundo. Desde el lado técnico/ correctivo, posiblemente se produzcan los temas de esta forma para dar un contrapunto de estabilidad en las instrumentales; hace falta una base nítida y limpia, con lo que si hay una parte de la canción que “grita”, la otra tiene que estar más controlada para nivelar al mismo tiempo que se apura el headroom.
De hecho, si te fijas en el tema de Bad Bunny que he linkeado al comienzo del blog, el bombo y el bajo eran de trap y la caja de tipo batería real, cosa bastante peculiar pero muy interesante; una especie de Frankenstein musical algo mejor conseguido que el auténtico y mas agradable de apreciar.
Pues ya ves, es precisamente en todos estos conceptos aplicados a nuevos cánones donde realmente esta la frescura, la mezcla y la maestría. Y por eso está arrasando el grunge trap. ¡Así de fácil! Como siempre digo, ahora te toca a ti innovar. ¡Piensa!
Eso es todo por hoy, te dejo algunos blogs relacionados, ¡nos leemos la semana que viene! Un abrazo!